Reflexiones

Lo que he aprendido en mi trayectoria como docente es que debemos comprometernos a estudiar los grandes problemas del contexto, tener claridad de lo que pretendemos contribuir a formar, apropiarnos con profundidad de los contenidos disciplinares y luego saber cómo llevar a cabo la mediación con los estudiantes para que aprendan y refuercen las competencias partiendo de saberes previos y aplicando estrategias didácticas pertinentes de acuerdo con las competencias, contenidos y problemas. Así lograremos que los estudiantes aprendan lo que requieren para su autorrealización y participación en la sociedad. En mi opinión considero que para lograr este cambio en la educación se hace indispensable que abandonemos el papel de transmisor de contenidos y adquiramos el papel de guía, dinamizador, mediador. Para adoptar este misión hay que comprometernos a cumplir las competencias del docente que la reforma nos señala, para ello: hay que realizarnos una profunda y sincera autoevaluación, actualizarnos constantemente a fin de potencializar lo mejor de nosotros y que esto nos ayude a ser verdaderos sujetos de transformación que responden a los cambios socioculturales y económicos, así como a los científicos y tecnológicos, debemos ser congruentes con los valores que enseñamos, así como promotores de la apertura, la curiosidad y la comprensión a lo diferente, debemos comprender la diversidad cultural existente en nuestro medio e innovar constantemente nuestros procesos de enseñanza. Por ejemplo, el avance de las TIC y el acceso cada vez mayor a herramientas y recursos digitales está permitiendo un uso progresivo de portafolios electrónicos, este curso me brindó la oportunidad de adquirir conocimientos respecto al empleo de estos recursos en mi práctica docente, en donde puedo destacar algunas de las ventajas de esta herramienta: Permiten estructurar de manera sencilla las actividades de aprendizaje y la evaluación de los estudiantes, facilita un seguimiento continuo y detallado del trabajo del estudiante, promueve la comunicación entre estudiantes y/o profesor, permite el uso de formatos multimediales y una amplia gama de opciones en su publicación en la web, opciones referentes a personalización de las interfaces y de las condiciones de privacidad, entre otras. Finalizo diciendo que todos los cambios son complicados, en ocasiones pesados, pero si se quiere progresar se tienen que tomar de manera positiva, además hay que decir que el desarrollo docente es un proceso de mejora continua que no tiene final pero que retroalimentándonos con nuestras experiencias podemos hacer de esta revolución algo fructífero en donde la población estudiantil será la beneficiada. ¡¡¡Hagamos historia en la educación de México!!! Por: Marcela Rosas